ESLOVENIA 2014

Pasando el día en Ljubljana, con permisos de sus Dragones.

¡Hola a todos!

Durante nuestra estancia en Zagreb, no dudamos en acercarnos un día a visitar la capital de Eslovenia: Ljubljana. Ambas ciudades están conectadas por tren en menos de 2 horas y media. Nos habían hablado muy bien de la ciudad y no podíamos dejar pasar esta ocasión.

Saltando en Ljubljana

Ljubljana y su castillo bien se merecen un salto

Desde lo alto de la colina, el imponente y medieval castillo vigila Ljubljana, y junto a sus puentes y dragones forman todo un símbolo de la ciudad. No pudimos conocer la ciudad por la noche ya que teníamos que volver a Zagreb, pero todo indica que el espíritu joven que se respira en sus calles y jardines perdura una vez se pone el Sol.

¿SABÍAS QUÉ… la capital eslovena se mantiene en pie desde el siglo I a.C. y los restos romanos pueden ser visitados? Por cierto, no te sorprendas si hay por allí algún vecino que te invita a coger un libro y sentarte en alguna de las cómodas hamacas que ponen en el parque que se encuentra junto a los restos romanos.

Estuvimos pocas horas, pero por si te ocurre lo mismo, te contaremos qué recorrido puedes seguir para aprovechar tu visita en esta ciudad o cómo fuimos desde Zagreb, además de algún susto que nos llevamos… en las mazmorras del castillo. Pequeña y bonita, es una ciudad limpia, bien cuidada y abierta a todo el que la quiera visitar.

En Ljubljana con el dragon

Yosha, no te preocupes. Yo te protejo del dragón.

El río Ljubljanica baña una ciudad alegre que nos ha hecho escribir junto a su nombre: IMPRESCINDIBLE, volver y conocer también el resto del país esloveno.

¡Hasta pronto!

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